Un sueño por cumplir - CAPÍTULO 18

(NARRA MARINA)

Todavía no me puedo creer lo que han hecho los chicos, Niall es un amor. No consigo hacerme a la idea de que estemos saliendo juntos, aquel chico que me robó el corazón en Mullingar hace más de un año. Desde que nos conocimos hasta ahora él no ha sabido nada de mi, pero yo he ido siguiendo su carrera musical en secreto, sin que mis amigas se enteraran. Sería difícil de explicar que el amor que sientes hacia uno de tus ídolos va más allá de lo que todo el mundo conoce, es decir, no me atrevía a decirles que él era el chico que ocupaba mi corazón desde que me robó aquel beso. No quiero ponerme ni cursi ni sentimental, pero el amor que siento hacia Niall es algo muy especial, nunca me había pasado y espero que nunca termine. Él es alguien demasiado importante en mi vida, no quiero perderlo.

-Hoy has venido preciosa – escucho como le dice Liam a Angy, pero yo sigo en mi mundo.

-¡Marina mucho más! – dice Niall sacándome de mis pensamientos.

-¡Lo sabemos! - decimos Angy y yo al mismo tiempo y comenzamos a reírnos.

-¿Por qué siempre hacéis lo mismo? - pregunta Niall con esa mirada tierna.

-¿Lo qué? - preguntamos nosotras al unísono.

-¡Lo habéis vuelto a hacer! - exclama mi chico.

-Siempre habláis a la vez o termináis las frases de la otra – ríe Liam.

-No nos damos cuenta... - digo yo riendo.

-Pues lo hacéis las cinco continuamente. - dice Niall mientras todos nos reímos.

Seguimos un rato más en el Sturbucks y después salimos a tomar el aire. Vamos caminando por la calle, Liam y Angy van dados de la mano, mientras Niall me lleva agarrada por la cintura. Hoy ha sido un buen día, ahora solo espero que las directioners no me odien. Solo quiero que sepan que yo soy una de ellas, que las adoro y que de verdad amo a Niall; no me gustaría que me empezaran a llegar mensajes de odio, aunque sé que pasará. Hay mucha gente a la que le voy a caer mal, pero yo lo único que puedo hacer es sonreír y ser tal como soy.

-Bueno, ¿os llevamos a casa? - pregunta Liam.

-Podemos ir en bus, cariño. - Le dice Angy dándole un suave beso en los labios.

-¿De verdad? No nos cuesta nada llevaros hasta allí – comenta Niall.

-Que no, bobo, no hace falta – le digo yo – En dos minutos llega el siguiente bus.

Los chicos esperan con nosotras hasta que el autobús llega, nos despedimos de ellos con un beso y nos montamos. Angy y yo vamos hablando de todo lo que nos ha pasado hoy y el camino se nos pasa volando. Antes de que nos podamos dar cuenta ya estamos entrando en casa.

-¡Contárnoslo todo! - grita Sofía nada más vernos entrar por la puerta.

-¡Ahora mismo! - dice Jessica arrastrándonos hasta el sofá.

-¡Hemos visto fotos vuestras con los chicos y algún video de hoy! - dice Sandra sin poder contenerse.

Angy y yo les explicamos todo con pelos y señales, aunque ellas ya lo sabían. Parece ser que hay unos cuantos videos circulando por Youtube de cuando los chicos se han subido a la mesa, nos han subido a nosotras y Angy ha dicho unas palabras. También hay muchísimas fotos en Twitter y nuestros seguidores han subido increíblemente, nos han llegado muchas menciones agradables aunque también hemos visto algún tweet un poco más ofensivo. Pero en general, todo parece perfecto.

Preparamos la cena entre las cinco y después cenamos en la mesa del salón mientras vemos la tele. En las noticias están echando uno de lo videos de esta tarde, el reportero dice que la noticia ha sido toda una bomba y que Angy y yo hemos dado una buena impresión. Nosotras nos alegramos enormemente, es lo mejor que nos podían decir.

Yo me voy pronto a a la cama, estoy bastante cansada y necesito dormir.

(NARRA JESSICA)

Unos rayos de sol entran por la ventana y consiguen despertarme, me levanto y voy al baño a lavarme la cara. Bajo a desayunar, Sandra ya está en la cocina y poco a poco van bajando las demás. Hoy vamos a dedicar todo el día a ir a mirar pisos por Londres, queremos encontrar un piso perfecto para las tres y tiene que ser antes de que empiece el curso.

Cuando terminamos todas de desayunar, vamos a vestirnos, nos ponemos ropa cómoda porque tendremos que recorrernos toda la ciudad. Después nos montamos en el coche y empezamos el viaje.

El primer piso que visitamos está bastante alejado de la universidad y no es muy espacioso, tiene tres pequeñas habitaciones, un baño, y una cocina que también hace de sala.

-¡Siguiente! - dice Sandra nada más verlo.

Pasamos toda la mañana así, mirando pisos demasiado pequeños que no nos gustan. Esto va a ser bastante más difícil de lo que nosotras pensábamos. No solo tenemos que encontrar el piso perfecto, sino que también tenemos que estar las tres de acuerdo.

-Vale, creo que por hoy ya he tenido suficiente – dice Marina dejándose caer en la terraza de un bar.

-Si, estoy harta de mirar pisos. Nos va a costar encontrar uno decente... - se lamenta Sandra.

-Seguro que pronto encontráis la casa perfecta – dice Angy.

-Nosotras os vamos a ayudar – corrobora Sofía.

-Si, vamos a encontrarlo, pero no hoy. ¿Y si esta tarde vamos de compras?

Todas apoyan mi idea y, después de tomar un café, vamos al centro comercial. Cuando llegamos ya es la hora de comer así que lo primero que hacemos es ir a un pequeño bar-restaurante a por unos bocadillos calientes.

Terminamos de comer y empezamos a entrar en las tiendas, una detrás de otra. Nos probamos ropa genial, compramos, vamos a una tienda donde venden gafas y empezamos a probarnos diferentes modelos y a sacarnos fotos unas a otras,... De repente sorprendo a unas chicas sancándonos fotos, yo se lo digo a las chicas y entonces nos giramos todas. Las que nos sacaban fotos se dan cuenta de que las hemos visto y se acercan tímidamente.

-Hola – dice una de ellas.

-¿Podemos sacarnos una foto con vosotras? - dice la más bajita refiriéndose a Angy y a Marina.

-¡Claro! - responden mis amigas al mismo tiempo.

Yo cojo la cámara y les saco un par de fotos, después nos presentamos todas y estamos un poco hablando con ellas. Las chicas son muy simpáticas y adoran a Angy y a Marina. Estamos hablando tranquilamente en el pasillo del centro comercial cuando dos chicas se acercan a nosotras y nos miran de arriba a abajo.

-¿Pasa algo? - pregunta una de las chicas intentando no alterarse.

-Si. No me digas que estáis adorando a estas dos putas.

-¿Putas? ¿Con qué derecho las llamas putas? - dice otra de las chicas.

-Están con Niall y Liam por su fama, se nota. Ahora, cuando más famosos son, de repente aparecen dos amigas y enamoran a mis niños, muy típico... - dice la que parece la cabecilla de las dos amigas.

-¡REPITE ESO! - exclama una de las chicas realmente enfadada.

-No os peleéis, no merece la pena. - dice Sofía intentando tranquilizarla.

-Si, que piensen lo que quieran... - sigue diciendo Marina.

-¿Os apetece ir a tomar un café chicas? - les invita Angy ignorando los comentarios ofensivos de esas dos chicas tan desagradables.

-¡Claro! - exclaman todas a la vez olvidándose por completo del pequeño incidente y de los insultos hacia Angy y Marina.

Vamos a un pequeño y tranquilo bar situado en la acera de en frente al centro comercial. Las chicas tratan a mis amigas con completa naturalidad, al principio les ha costado hablar con ellas pero después de unos minutos se han dado cuenta de que son otras dos directioners más, como ellas. Aunque directioners con suerte.

*¡LO SIENTO! ¡NO ME ODIÉIS NI ME MATÉIS! Sé que he tardado en publicar el capi y que es un desastre, pero el siguiente intentaré hacerlo mejor y tardar menos días. Ya sabéis, dejad un comentario con vuestra opinión :) ¡Un beso! :3 *

Un sueño por cumplir - CAPÍTULO 17

(NARRA ANGY)

Marina y yo subimos rápido a nuestras habitaciones, en una hora hemos quedado con nuestros chicos en el centro comercial. Nos parece raro que hayan querido quedar en un sitio tan público, pero ninguna de las dos le damos importancia a ese detalle.

-¡Marina! ¿Te falta mucho? - pregunto gritando desde mi cuarto.

-Ya casi estoy – me contesta ella entrando en mi habitación – Te cojo la colonia, ¿vale? Me encanta.

-Claro cógela – digo analizando su ropa – ¡Estás genial!

-¿Yo genial? ¡Mírate tu!

Las dos empezamos a reírnos y nos quedamos unos instantes mirándonos en el espejo. Marina lleva unos shorts verdes y una camiseta blanca, con unas bailarinas del mismo color.

Yo me he puesto shorts rojos de tiro alto y una camiseta de Superman con mis converse azules; y, por supuesto, no me he olvidado del collar en forma de clave de sol que me regaló Liam. Nunca me lo quito.

Cogemos nuestras cosas y bajamos al salón, las chicas están todavía allí sentadas pensando qué hacer. En cuanto nos ven empiezan a silbar y a piropearnos, después de unos minutos haciendo el tonto, nos despedimos y vamos a coger el bus para ir hasta el centro comercial.

-¿A ti no te parece raro que hayamos quedado en el centro comercial? - pregunta Marina de repente.

-Pues un poco, supongo querrán llevarnos a algún sitio.

-Ya, pero no sé, eso de la cita doble... Hay algo que no me encaja.

Dejo pasar ese presentimiento que tiene Marina, es mejor no darle muchas vueltas, aunque yo también pienso que es muy raro que Liam y Niall quieran vernos en un lugar con tanta gente y a las dos a la vez. Como he dicho, no voy a darle vueltas.

Yo voy en el asiento junto a la ventanilla y voy mirando las calles abarrotadas de Londres, no puedo evitar reírme cuando veo a unas chicas con camisetas de One Direction. Y pensar que hace poco yo era una directioner más... Los sueños se cumplen, solo hay que tener esperanza y sonreírle a la vida por muy mal que te trate.

-¡OH DIOS MÍO! - exclama Marina en un tono un poco elevado, mirando fijamente la pantalla de su móvil.

-¿Qué pasa? - pregunto interesada por su reacción.

-Mira que acabo de ver en Twitter – me dice – Niall y Liam están cantando por el centro comercial con una guitarra. ¡Mira la foto!

-¡Están locos! - digo yo mientras las dos nos reímos, sin duda estamos saliendo con las mejores personas del mundo.

En diez minutos el autobús llega a su destino, el centro comercial. Antes de entrar vemos que está todo lleno de directioners, chicas y chicos, todos gritando. Entramos haciéndonos hueco como podemos entre la gran masa de gente. Intentamos buscar a los chicos con la mirada pero es imposible, hay demasiada gente.

-Vamos al piso de arriba, desde allí veremos mejor la primera planta – sugiere Marina.

Le hago caso y, con bastante esfuerzo, conseguimos subir por las escaleras mecánicas hasta el segundo piso. Inspeccionamos con la mirada el piso inferior, pero no distinguimos a los chicos. Esto es como buscando a Wally...

-¡Allí están! - grito yo de repente.

Empezamos a bajar rápidamente hasta llegar casi a donde están los chicos, nos acercamos lentamente esquivando a la gente y llegamos frente a ellos. Nos ven muy rápido y nos sonríen, en cuanto terminan de cantar WMYB, se acercan hasta la cabina de información del centro comercial. Un minuto después salen con un micrófono en la mano y se suben a una mesa de una cafetería que está al lado.

-¡Hola directioners! - grita Niall, el micrófono tiene altavoces por todo el centro comercial y todas las directioners les escuchamos intrigadas.

-Esperemos que os haya gustado este concierto improvisado – dice Liam sin dejar de sonreír.

-Bueno, hemos venido aquí porque tenemos algo muy importante que deciros – continúa Nialler.

-Queremos decíroslo nosotros antes de que os enteréis por otros medios.

-Si, esperamos que os parezca una buena noticia.

-Y estamos seguros de que estaréis tan felices como nosotros.

-Sinceramente, yo no sé como decirlo... - murmura Niall.

-Hemos conocido a dos chicas increíbles – suelta Liam de repente mientras Marina y yo nos quedamos asombradas.

-Y hemos empezado a salir con ellas. También son directioners y están aquí, entre todos vosotros – sigue diciendo Niall.

-Os aseguro que son unas chicas increíbles, guapas, inteligentes,simpáticas,... Confiamos en todos vosotros y sabemos que las aceptaréis como nuestras novias.

-Porque estamos realmente enamorados de ellas – concluye Niall.

-Queríamos presentároslas nosotros antes de que vierais fotos o escucharais rumores. - dice Liam y hace una pequeña pausa; después me dice con la mirada que me acerque a él, me tiende la mano y me subo a la mesa – Esta es mi novia, Angy.

-Y esta es Marina – dice Niall ayudándola a subir.

No puedo describir todo lo que siento en este momento, estoy feliz y a la vez asustada. No sé si los directioners me aceptarán como novia de Liam, aunque supongo que habrá de todo. Niall y Liam les dicen algunas palabras más a todos los presentes, pero antes de que se despidan, les pido el micrófono.

-Hola. – digo tímida – Me llamo Angy y quería deciros que espero que me aceptéis. Yo hace nada era una directioner cualquiera, adicta a sus ídolos, como vosotros; pero persiguiendo mis sueños he conseguido estar con él chico más maravilloso del mundo. No os rindáis, nunca. También quería decir que si yo estuviera en vuestro lugar me costaría aceptar que mis ídolos tuvieran novia por miedo a que le hicieran daño, pero os aseguro que le amo más que a mi propia vida y que nunca dejaré de hacerlo.

Sin querer una lágrima resbala por mi mejilla recordando todo lo que ha hecho Liam por mí desde que nos conocemos y lo mucho que me ha ayudado con mis problemas. Él me seca esa lágrima acariciando mi mejilla suavemente y me da un suave beso en la frente. Me ayuda a bajar de la mesa y cuando los cuatro estamos abajo, dejamos que ellos se queden un poco con los fans firmando autógrafos y sacándose fotos mientras Marina y yo salimos a tomar el aire. Ha sido todo demasiado increíble.

-¡Tía, has estado genial! Apuesto a que después de tus palabras todas las directioners te adoran.

-Seguro que todas no, siempre hay gente que no acepta que sus ídolos tengan novia. Lo único que espero es que no sean muy crueles con nosotras.

Nada más salir del centro comercial, dos chicas un par de años más pequeñas que nosotras se quedan mirándonos fijamente con una sonrisa tímida en los labios. Marina y yo les devolvemos la sonrisa y a los dos segundos las tenemos delante intentando hablar con nosotras sin tartamudear.

-Hola... – dice la chica morena.

-Hola – contestamos las dos a la vez con una sonrisa.

-¿Os podéis sacar una foto con nosotras? - pregunta la rubia.

-¡Claro! - contesto yo.

-¿Cómo os llamáis? - se interesa Marina.

-Yo soy Cristine – dice la rubia que parece menos tímida – Y esta es mi amiga Tania.

-Encantadas, yo soy Angy y esta es Marina.

-Lo sabemos, estábamos dentro – dice Cristine - Has sido muy valiente al plantarnos cara a los directioners, decir que amas a Liam ha servido para ganarte nuestra confianza porque se notaba que hablabas de corazón

-Y Marina, me alegro de ver tan feliz a Niall, siempre ha sido mi favorito y me alegro de que haya encontrado a una chica tan guapa como tu. Seguro que me lo cuidarás bien – continúa Tania.

-Eso no lo dudes, le amo – contesta Marina.

Nos sacamos un par de fotos con ellas y después se van, ha sido nuestro primer contacto con las fans y la verdad es que ha sido muy bueno. Nunca me ha gustado mucho llamar la atención y sé que a partir de ahora todos los directioners me reconocerán por la calle, algunos me apoyarán y otros me insultarán, pero no voy a dejar que eso sea un problema en la relación que tengo con Liam.

Esperamos sobre media hora sentadas cerca de la puerta del centro comercial hasta que salen los chicos. En cuanto nos ven le piden a los directioners que les han seguido un poco de intimidad y poco a poco se van dispersando. Liam se acerca a darme un beso y Niall hace lo mismo con Marina, nos damos la mano y empezamos a caminar por la calle.

-¿Qué os ha parecido? - pregunta Niall.

-¡Estáis locos! - decimos Marina y yo al mismo tiempo.

-Sentimos no haberos avisado, pero era una sorpresa para todos. - dice Liam.

-Ya hemos estado con algunas fans, han sido muy simpáticas – digo yo.

-Y después del discursito de Angy, la adoran – comenta Marina sonriendo.

Continuamos caminando hasta un Sturbucks cercano, allí pedimos cafés y chocolates, nos sentamos en una mesa y empezamos a hablar y a hacer el tonto.

*¡Hola! Aquí os dejo el capítulo 17, me gusta la historia del capítulo pero no me gusta como la he escrito; pero bueno, vosotros juzgáis ;) Decidme que os parece en un comentario en el blog, comentario en Tuenti (Marta Larala Directioner) o mención en Twitter (@MartaLarala_1D) Un beso enorme :3 *

Un sueño por cumplir - CAPÍTULO 16

(NARRA SANDRA)

Estoy bailando perdida en medio de la pista, hace mucho que no veo a Harry. Está muy frío conmigo y no sé porqué, en la casa cuando nuestras miradas se han cruzado el ha apartado la cara y en lo que va de noche ni se ha dignado a mirarme. He intentado tener alguna conversación con él a solas, pero siempre mete a alguno de los chicos y él se escaquea. Esta situación me mata, sé que no voy a salir con él por muy enamorada que esté, no puedo obligarle a él a que sienta lo mismo que yo; pero, ¿tan difícil es ser amigos? No sé, algunos de nuestros amigos salen juntos, Liam y Angy, Niall y Marina, Louis y Sofía están en proceso y seguro que Zayn y Jessica también empezarán a salir pronto; yo no pido salir con él, yo solo quiero ser su amiga.

Necesito despejarme y dejar de darle vueltas a la cabeza, ¡me estoy volviendo loca! Subo las escaleras y voy hacia la barra a pedir algo, preferiblemente con alcohol. Necesito olvidar y disfrutar de la noche. La mayoría de la gente está en la pista de baile por lo que el camarero me sirve rápido. Voy hacia una mesa y me dejo caer en el sofá que hay contra la pared, estoy bastante cansada.

Llevo un rato sola, sentada en el sofá de la discoteca, intentando no pensar en Harry, cuando de repente le veo subiendo por las escaleras. No puedo evitar sonreír y estoy a punto de levantarme para ir hacia donde él, pero de repente veo a una chica pelirroja y guapísima que se asoma tímida tras él. Van agarrados de la mano y caminan muy juntos, ella le da un suave beso en los labios y en un segundo todo mi mundo se derrumba. Las lágrimas van cayendo descontroladas por mis mejillas, espero a que ellos se sienten en una mesa alejada de las escaleras para salir corriendo de allí. Bajo del segundo piso y voy esquivando gente hasta llegar a la puerta de entrada, sigo corriendo por la calle hasta que me paro porque me cuesta respirar.

Me siento en un banco bajo el cielo londinense, oscuro y estrellado; ha refrescado y sin chaqueta empiezo a tener frío. No sé cuanto tiempo llevo aquí, solo intento contener mis lágrimas aunque sin buenos resultados. Mi móvil empieza a sonar, me seco las lágrimas y miro la pantalla de mi móvil: Angy. No voy a coger, no me siento con fuerzas para hablar con nadie. Segundos más tarde me llama Marina, seguida de Jessica y de Sofía. Durante unos largos minutos mi teléfono no deja de sonar, una chica detrás de otra me van llamando. Yo no consigo reaccionar y me quedo allí, sentada en la fría calle y sin poder pensar con claridad.

No soy consciente del tiempo que ha pasado, pero el sol empieza a asomarse; miro el reloj y veo que ya son las ocho de la mañana. Miro hacia los lados pero no reconozco la calle, vuelvo a mirar el móvil y veo más de veinte llamadas perdidas de mis amigas. Empiezo a caminar sin rumbo fijo, veo un taxi al fondo de la calle y voy rápidamente hasta allí. Entro y le doy la dirección de la casa de Sofía, en poco menos de media hora el taxi me deja frente a la casa. Le pago y me dirijo hasta la puerta buscando las llaves en el bolso, respiro hondo y meto la llave en la cerradura, media vuelta y la puerta se abre. Nada más entrar Angy sale corriendo del salón y viene a darme un abrazo.

-¡Sandra! - grita ella mientras se tira a mis brazos.

-¿Dónde estabas? - dice Jessica corriendo hacia mi.

-¿Estás bien? - pregunta Sofía después de abrazarme.

-¡Estábamos muy preocupadas! - exclama Marina dándome un sonoro beso en la mejilla.

-Sé fuerte cariño – me susurra Angy al oído mientras me da un suave beso en la mejilla y las demás me arrastran hasta el salón.

En cuanto entro en la sala me doy cuenta de a qué se refería Angy, es muy intuitiva y estoy segura de que sabe lo que me ha pasado. Los chicos se levantan y vienen a darme abrazos y besos, todos menos uno; cuando todos terminan Harry se acerca a mi y me da un abrazo.

-Me alegro de que estés bien – me susurra en el oído.

Una sonrisa tímida sale de mis labios sin que yo pueda evitarlo, el abrazo termina y la chica pelirroja corre a darle la mano.

-Tu debes de ser Sandra, encantada – me dice dándome dos besos – Yo soy Megan, la novia de Harry.

Ella le da un beso en la mejilla y yo intento sonreír, esto no está siendo nada fácil. Me siento en el sofá y de repente me fijo en la cara de Zayn.

-¿Pero qué te ha pasado? - pregunto sorprendida.

-Un pequeño problema en la discoteca... - comenta él después de echarle una rápida mirada a Jessica.

Yo prefiero no preguntar más y sin darme cuenta mis ojos empiezan a cerrarse, estoy muy cansada y, después de disculparme, subo a mi habitación. Minutos más tarde escucho a los chicos despedirse y creo que las chicas nos quedamos solas en casa; un segundo más tarde estoy completamente sumida en un profundo sueño.

Me despierto sobre las dos, he dormido escasas cinco horas pero no he conseguido descansar. Cuando me levanto voy hacia la cocina y veo allí a Angy que me saluda con una mirada tranquilizadora.

-¿Qué tal has dormido?

-No muy bien.

-Él te quiere, estoy segura. - dice ella después de una pequeña pausa.

-¿Cómo estás tan segura?

-Ayer estaba muy preocupado por ti, mucho más de lo que te imaginas. Cuando no nos cogías el móvil él estaba a punto de echarse a llorar. Se nota que siente algo muy fuerte por ti.

-¿Y Megan? - pregunto yo dudando de todo lo que me dice Angy.

-No lo sé, tal vez solo sea un pasatiempo. O igual le gusta, pero no le quiere.

-Que me mientas no va a hacer que me sienta mejor...

-No te miento, Sandra. Solo te estoy diciendo lo que pienso, además sabes que yo siempre he tenido buen ojo para la gente.

-Si, en eso tienes razón. - digo con un atisbo de esperanza - ¿Qué pasó ayer? ¿Quién es esa tal Megan? ¿Y de que se conocen?

-Harry no habló nada en toda la noche, ya te he dicho que estaba muy preocupado. Pero Megan no se calló ni un segundo, nos dijo que se conocen desde hace unos cuantos meses. La primera vez que hablaron fue en una discoteca y según ella conectaron muy bien. Ayer empezaron a salir, pero dudo que sea algo serio de verdad. Me conoces y sabes que no me gusta juzgar a las personas sin conocerlas, pero esta chica no me gusta. Es muy guapa, no lo voy a negar, pero creo que utiliza a Harry. No lo quiere a él, quiere su fama. Aunque repito que solo es mi opinión, espero estar equivocada.

-No puedo soportar verlos juntos, ¿qué voy a hacer?

-Aguantar y ser su amiga, ya te he dicho que seguramente no tienen nada serio y puedo asegurarte que no durarán.

-Gracias, Angy – le digo mientras le doy un beso en la mejilla.

Empezamos a hacer la comida y poco a poco van bajando las demás, todas me preguntan qué tal estoy y cuando terminamos de comer las cinco nos sentamos en el sofá del salón y les cuento las historia.

Termino de hablar y espero sus repuestas, al parecer todas piensan los mismo que Angy sobre Megan. ¿Será solo para intentar consolarme? No lo sé, pero yo voy a intentar llevarme bien con ella. Y con Harry no sé que haré, Angy me ha dicho que sea su amiga, como hasta ahora; el problema es que hasta ahora tampoco hemos sido muy buenos amigos, por lo menos estos últimos días. No tengo ni la menor idea de qué le pasa conmigo, pero está muy distante.

Vale, no voy a empezar a darle vueltas a la cabeza por él. Tengo que desconectar y para eso una tarde de chicas es perfecta.

-¿Planes para hoy? - pregunta en ese mismo instante Jessica.

-Me apetece una tarde solo de chicas – comento yo.

-¡Perfecto! - dice Sofía.

-Con nosotras no contéis – dice Marina refiriéndose a Angy y a ella – Hemos quedado con Liam y Niall.

-Pero si os molesta podemos cambiar los planes – dice Angy mientras Marina asiente con la cabeza.

-¿Molestarnos? ¡No seáis tontas! - digo yo.

-¡Ir y pasarlo bien! - grita Sofía.

-Bueno, os dejamos ir con una condición – comenta Jessica con una pícara sonrisa.

-¿Cuál? - preguntan las dos al mismo tiempo.

-¡Contárnoslo todo con TODO detalle! - contesta marcando mucho ese “todo”.

-Trato hecho – dice Angy sonriendo y mirando a Marina.

*¡Hola! Aquí termina el capítulo 16, espero que os guste :) He tenido un problema familiar y no tengo muchas ganas de escribir, he publicado este capi porque ya lo tenía terminado pero no sé cuando publicaré el siguiente. Intentaré que sea pronto porque quiero volver a la normalidad. Bueno, no voy a aburriros con mis problemas... Como siempre, leer y decidme qué os parece :) Un beso *