(NARRA
MARINA)
Después
de pasar casi toda la tarde hablando con los chicos Sofía dice que
es tarde y que nos tenemos que ir ya a casa, hay que ir pronto para
preparar la fiesta. Antes de irnos invita a los cinco a cenar con
nosotras, ellos aceptan encantados y yo me alegro mucho de que venga
Niall..
Todas
las chicas saben lo de mi amor hacia aquel chico desconocido con el
que me encontré hace más de un año en Mullingar, lo único que no
saben era su nombre. Al principio no sé porqué no les dije que era
Niall Horan, él no era famoso y supongo que al no conocerlo no
importaba mucho si les decía como se llamaba o no. Cuando se
presentó a TXF yo lo reconocí al momento, pero ya era tarde para
decirle a mis amigas que era él, lo más probable es que no se lo
creyeran. Además, las dos empezaron a ser directioners y eso
complicó la situación. Cuando hoy les he contado la historia de
como nos conocimos a Angy y a Sofía y después Angy me ha preguntado
si no había vuelto a saber nada de él, no he podido evitar ponerme
nerviosa. Por otro lado, siempre me ha enfadado que mis amigas hablen
de One Direction, bueno, en realidad no me enfado, me pongo celosa
cuando dicen lo perfecto que es mi Niall; pero yo como excusa siempre
les digo que no me gusta su música. No entiendo como me he podido
meter en esto, si les hubiera contado todo desde el principio no me
habría complicado la vida innecesariamente. Pero bueno, mañana se
lo contaré todo.
Voy
tan concentrada en mis propios pensamientos que no me doy cuenta de
que ya estamos a unos escasos diez metro de casa.
-¿Estás
bien? - dice Niall poniéndose a mi lado.
-¿Qué?
- digo yo volviendo al mundo real y apartando todos mis pensamientos
y recuerdos.
-Que
si estás bien.
-Si,
si, tranquilo – le digo con una sonrisa tranquilizadora.
-¿De
verdad? Es que estabas muy callada.
-Solo
pensaba, estoy bien – vuelvo a sonreír y esta vez el me acompaña.
Entramos
en la casa y después de hacer unas pizzas en el horno, cenamos todos
juntos. Es la hora de preparar la fiesta para Angy, tenemos algo más
de media hora, después los invitados empezarán a llegar. Pero hay
un problema, mi amiga está en casa. Todavía estamos en la cocina,
yo estoy sentada junto a Niall y le susurro al oído que se lleve a
Angy durante un rato.
-Oye
Angy – dice levantándose y acercándose a ella - ¿Vienes a dar un
paseo? Tengo que hablar contigo.
-Claro,
espera que voy a por mi chaqueta – le dice sonriendo.
Veo
que mientras salen de casa los dos juntos Liam les mira con muy mala
cara. ¡No me lo puedo creer! ¡Liam está por Angy! Me río y él se
da cuenta de que le estoy mirando, agacha un poco la cabeza y se pone
rojo.
-Te
he pillado guapo – le susurro cuando paso a su lado.
Él
vuelve a sonrojarse y a agachar la cabeza. ¡Qué mono! Ya me
gustaría que Niall hiciera lo mismo cuando piensa en mi, puedo soñar
todo lo que quiera pero en la realidad nunca pasará. Aunque por lo
menos todavía se acuerda de mi, eso me hace un poco más feliz.
(NARRA
ANGY)
Niall
y yo salimos de la casa y empezamos a caminar entre los árboles, es
una noche preciosa, muy luminosa y estrellada. Empezamos a caminar
por el sendero que lleva al lago, es un lugar tan hermoso que mis
pies siempre me llevan allí. El camino empieza en silencio, ninguno
de los dos dice nada pero al final, mi curiosidad lo rompe.
-¿De
qué conoces a Marina, Niall? - voy directa al grano y él se
sorprende por mi pregunta.
-Creo
que yo no debería contarte eso... Mejor habla con ella.
-¡Venga
Niall! Cuéntamelo, por favor, que me muero de curiosidad – le digo
poniendo cara de niña pequeña.
-Que
no Angy...
-Te
juro que si algún día Marina me lo cuenta, yo haré como si no
supiera nada de nada.
-Está
bien... - dice él cediendo.
-Te
escucho – le digo con una de mis mejores sonrisas.
-Fue
hace algo más de un año. No sé si lo sabes, pero yo soy irlandés.
Yo estaba en mi ciudad, Mullingar, y conocí a una chica preciosa con
unos ojos azules que conseguían hacerme temblar y una sonrisa
indescriptible. Nos hicimos muy amigos y se puede decir que me
enamoré de ella – agacha la cabeza y se pone rojo, después de una
pequeña pausa continúa con la historia – Ella se tenía que ir y
yo le hice una promesa, le dije que nunca la olvidaría. Pero antes
de que se fuera no pude evitarlo y le besé. No volví a saber nada
de ella, hasta hoy.
-¡Es
increíble! - digo emocionada – ¡Eres el misterioso irlandés que
le robó el corazón!
-¿Qué?
¿Ella ya te había contado la historia?
-Si,
me la ha contado esta mañana. Es que hacía cuatro años que no veía
ni a Sandra, ni a Jessica, ni a Marina. Yo también soy irlandesa,
pero me mudé aquí y no nos volvimos a ver, hasta hoy que han venido
para celebrar mi 18 cumpleaños. Y hoy estábamos hablando y ha
salido en la conversación el tema de los chicos, y bueno nos contó
la historia.
-¿Pero
no os dijo que era yo?
-No,
no nos dijo tu nombre. Supongo que sería porque como eres famoso...
-Pero
se sigue acordando de mi – dice con una sonrisa.
-Y
por lo que veo, tu también de ella.
-Si,
y ya que te he contado todo esto, no te voy a mentir ahora. Hoy,
cuando la he visto, he sentido lo que sentí el día que la conocí.
-No
tendría que decirte esto, pero bueno... Estoy completamente segura
de que ella siente lo mismo – en cuanto le digo esto una preciosa
sonrisa invade su cara.
Sin
darnos cuenta ya llevamos un buen rato junto al lago hablando de
Marina. De repente recuerdo que Niall me ha sacado a pasear porque me
quería decir algo. Le miro y veo que él no para de mirar el reloj.
-Oye
Niall, ¿qué querías decirme?
-¿Qué?
-Antes,
cuando estábamos en casa, me has dicho que querías hablar conmigo.
-¡Ah,
eso! - dice mientras ríe – Solo quería distraerte.
-¿Distraerme?
¿Para qué?
-Ahora
lo sabrás – me dice sonriendo – Vamos que ya ha pasado un buen
rato.
Sigo
sin entender porqué querían distraerme, pero no le doy mayor
importancia. Yo sigo penando en la preciosa historia de amor que
tienen Niall y Marina, que romántico que ninguno de los dos se haya
olvidado del otro y que sigan estando igual de enamorados después de
tanto tiempo sin verse. Durante el silenciosos trayecto, de vez en
cuando, miro a Niall y le veo sonreír, seguro que está pensando en
mi amiga.
Antes
de darnos cuenta ya estamos en casa y cuando entramos, vamos directos
al salón. Nada más entrar, mis amigas y los chicos me reciben
cantando “Cumpleaños feliz”. Los chicos van con la ropa de
después del concierto, algo informal pero muy guapos, aunque mis
niñas se han cambiado y van preciosas. Sofía lleva un vestido de
encaje azul de manga corta muy bonito, con unos zapatos abiertos de
tacón del mismo color que tienen un lazo en la punta, y lleva
algunos mechones de su pelo rubio atados con un lazo también azul.
Jessica
lleva un vestido de palabra de honor amarillo que realza su piel
morena, también lleva unas sandalias plateadas y se ha echado su pelo
rizado hacia un lado, colocándose una flor del mismo color que el
vestido.
Me
ha extrañado un poco que Marina vaya tan pija y con tanto rosa, pero
le queda genial ese vestido y esa diadema con un lazo en la cabeza.
Su vestido también es de palabra de honor y tiene un poco de vuelo
de la cintura hacia abajo. También me han encantado los zapatos
negros que lleva haciendo juego con el cinturón.
El
vestido verde de tirantes que lleva Sandra es muy bonito y le hace un
cuerpo espectacular. Se ha hecho un moño precioso y tengo que
decirle que algún día me preste esos zapatos.
Cuando
terminan de cantar se acercan con dos cajas envueltas en papel de
regalo azul. Me dan la primera y me quedo sin palabras cuando me
encuentro con un vestido precioso, es negro de palabra de honor,
tiene rayas azules y un lazo en la cintura. Parece muy caro y me
siento culpable, no tendrían que haberse gastado dinero en mi.
-No
puedo aceptarlo...
-¡No
seas boba! - me dice Sandra.
-En
serio, no tendríais que haberos molestado – vuelvo a decir yo.
-¡Mira
que eres tonta, eh!... -dice Sofía.
-¡Venga,
abre el otro! - me dije Marina acercándome la otra caja.
-Esperamos
que también te guste – dice Jessica.
Cojo
la otra caja y empiezo a desenvolverla, es más pequeña que la
anterior pero la sorpresa es igual de grande. Dentro hay unos zapatos
de tacón azules, abiertos en las puntas y con lazos a un lado, ¡son
preciosos! Después de agradecérselo una y mil veces me dicen que
suba y que me prepare, a si que les hago caso. Los chicos se quedan
en el salón mientras mis amigas y yo subimos a mi habitación, me
visto y entre las cuatro me maquillan y me hacen un semirecogido. La
verdad es que no estoy nada mal.
-Oye
Angy, tenemos que decirte una cosa – me dice Sandra.
-Es
otro regalo de cumpleaños – continua Jessica.
-¡Hablar
ya que me ponéis nerviosa! - insisto yo.
-Vamos
a hacerte sufrir un poquito más – dice Marina mientras las cinco
guardamos silencio durante unos largos segundos.
*¡Hola! Antes de nada, quiero pediros perdón por estar dos días sin publicar y con el capítulo ya escrito. Pero no he podido, esto de estar de vacaciones... jajajaja Pero bueno, ya tengo la mitad del capítulo siguiente escrito, espero terminarlo pronto y poder publicarlo ^^ Un besitoo :3 *
*¡Hola! Antes de nada, quiero pediros perdón por estar dos días sin publicar y con el capítulo ya escrito. Pero no he podido, esto de estar de vacaciones... jajajaja Pero bueno, ya tengo la mitad del capítulo siguiente escrito, espero terminarlo pronto y poder publicarlo ^^ Un besitoo :3 *